(1425-27)
Es una obra que pertenece al
conjunto de frescos que adornan la capilla de la familia Brancacci en la
iglesia del Cármie (Florencia), realizada por Masaccio.Es una de las escenas
más famosas sobre la vida de San Pedro, narrado por San Mateo. El tributo está en la fila superior del muro lateral izquierdo,
junto a la expulsión
de Adán y Eva. Se describe en el fresco tres escenas la primera
que es la del medio, que el recaudador de impuestos le dice a Jesús y sus
discípulos que tienen que pagar el impuesto del tributo para el templo, en la
segunda escena de la izquierda, le manda Jesús a Pedro que pesque un pez, que
en el cual encontrará la moneda del tributo para pagársela al recaudador, que
se contempla en la tercera y última escena de la derecha. Masaccio lo que
quería representar era un fresco con tres acontecimientos
sucesivos. La importancia de la pintura radica también en la
representación de Jesús con rasgos humanos, y de la misma altura que los
discípulos, lo que supone un rechazo revolucionario a la "perspectiva
jerárquica".
Masaccio usa la teoría de colores clásica para
destacar el espacio en la pintura. Los colores cálidos avanzan, los
fríos retroceden. Por eso que Masaccio pintó a los apóstoles con capas azules y
rojas frente a un fondo grisáceo.
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